El calentamiento global es un problema que experimentamos a diario, como el aumento de las temperaturas, la subida del nivel del agua y la mayor frecuencia de fenómenos meteorológicos extremos. Como uno de los principales responsables de las emisiones de CO2, el transporte de mercancías también debe formar parte de la solución. El objetivo de este informe técnico es destacar las políticas, iniciativas y proyectos que utilizan los países miembros de PIARC para reducir las emisiones de CO2 del transporte de mercancías. Asimismo, la contaminación y el ruido son cuestiones importantes, especialmente en las zonas urbanas. Estos retos podrían beneficiarse de las medidas para reducir las emisiones de CO2. Los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU incluyen estas áreas, así como la necesidad de movilidad y crecimiento económico.

Para alcanzar el objetivo climático de 2023, en la década de 2020 deberán producirse importantes cambios en la flota de camiones. Los países, las regiones, los estados y las ciudades necesitan planes, estrategias y programas para hacer más ecológico el transporte de mercancías. El Green Deal europeo y Fit for 55, y la Ley de Reducción de la Inflación de EE.UU. de 2022 son ejemplos de acciones que dirigen a todo un continente hacia la neutralidad del carbono, incluyendo el sistema de comercio de emisiones, la prohibición de la venta de motores de combustión interna (diésel y gasolina), el desarrollo de infraestructuras para combustibles alternativos y los instrumentos de bonificación. Además de los planes, estrategias y programas de ecologización, distinguimos cuatro enfoques para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero:

Lecciones aprendidas: El transporte de mercancías es clave para nuestro modo de vida moderno, y nuestro modelo económico se basa en el comercio dependiente del transporte. Cuando las soluciones ecológicas son también las mejores desde el punto de vista económico para el responsable de la toma de decisiones, su aplicación es más rápida. Las cuotas de los diferentes modos de transporte en el volumen de tráfico son bastante estables a lo largo del tiempo. En las últimas décadas, el reto de cambiar el reparto modal es tenazmente grande, algo de lo que no todo el mundo es plenamente consciente. Incluso en circunstancias extremas, como la pandemia de Covid, la crisis energética y la guerra de Ucrania, el predominio del transporte por carretera no cambia sustancialmente.

Objetivos para ayudar a configurar la política: Las responsabilidades más importantes que deben asumir las autoridades públicas son fijar objetivos de reducción de las emisiones de CO2, financiar estrategias, programas y planes, asegurar el conocimiento, el desarrollo y la normativa, iniciar la financiación y las infraestructuras necesarias y difundir el sentido de urgencia. Las autoridades pueden asegurar la posibilidad y la rentabilidad para los pioneros aplicando su poder adquisitivo, su autoridad reguladora y sus responsabilidades infraestructurales. Deben explorarse las posibilidades dentro de las medidas tradicionales. Los objetivos pueden entrar en conflicto entre sí. Las autoridades deben elegir sabiamente entre las medidas tradicionales más amplias que pueden ralentizar la disminución de las emisiones de CO2 o incluso aumentarlas y las medidas más directas para una reducción rápida. Las soluciones para el tráfico de mercancías y de pasajeros podrían considerarse conjuntamente. Es más eficaz aspirar a resultados que a soluciones específicas, siempre que sea posible.

El calentamiento global tendrá enormes repercusiones negativas en muchos países de renta baja y media debido a su gran dependencia de los recursos naturales y a su limitada capacidad para hacer frente al efecto extremo del cambio climático. Además, las regiones con políticas descarbonizadoras más ambiciosas pueden aumentar su competitividad en el mercado mundial en detrimento de las regiones con políticas menos ambiciosas, según las previsiones de la ITF. Se espera un aumento de los impuestos sobre el CO2 y de las cuotas de comercio de CO2, así como una demanda por parte de los clientes de productos y servicios de emisiones cero. Dos cuestiones importantes son (1) qué medidas son las más adecuadas para los países de renta baja y media como punto de partida, y (2) si las nuevas tecnologías les permitirán dar el salto a soluciones de emisiones cero o bajas y eficaces para la construcción de carreteras y el transporte de mercancías.